LA REINA DE LA BELLEZA DE LEENANE.
Teatro Nuevo Alcalá. (Sala 2)
Autor: Martin Mc Donagh.
Traducción y Adaptación: Vicky Peña.
Dirección: Álvaro Lavín.
Intérpretes: Gloria López, Maite Brik, Pablo Gómez y Orencio Ortega.
...LA LUCHA CONTRA EL MIEDO...
Esta obra se estrenó en Barcelona en 1998. Vicky Peña y Montserrat Carulla (Madre e hija en la vida real) fueron las protagonistas de un duelo teatral en el que los miedos visten de egoísmo la falta de afecto, las inseguridades y la libertad.
El texto nos sitúa en un pueblecito irlandés. En la casa donde viven, o sobreviven, una madre y una hija con el único fin, con el único estímulo, de hacerse daño...
Quizá ambas sean las dos caras de una misma moneda, de un mismo sentir, de un mismo miedo, de una misma necesidad. Quizá ninguna de las dos quiera herir a la que tiene al lado. Quizá ninguna de las dos sepa el dolor que está sembrando en el ser que las acompaña en el vacío deambular en el que sus existencias se han convertido, pero quizá tampoco sientan la necesidad de pensarlo, de analizarlo, de ponerse en el lugar de la otra... bastante tienen con respirar el escaso oxígeno que las exigencias mutuas se permiten...
Maite Brik es una madre posesiva, dependiente, desoladamente egoísta. Una madre que finge estar enferma con el único objetivo de amarrar el futuro de una hija de cuarenta años que ni tan siquiera ha comenzado a vivir. Esa hija está interpretada por Gloria López, productora, también, del nuevo montaje del texto de Mc Donagh. Ésta da vida a una hija que odia irremediablemente a esa madre que le roba la felicidad en cada suspiro quejoso, en cada olvido premeditado, en cada mirada acusadora, en cada broma pesada...
Ambas tienen miedo a vivir y la necesidad de beberse la vida de un solo trago. Esa hija de cuarenta años que aún es virgen tiene la irrefrenable necesidad de ser sin el lastre pesado de una madre que la humilla y menosprecia...
Maite Brik ha comentado que en esa madre no hay maldad... Es difícil creerlo, es difícil escarbar en el interior de esa mujer que quizá rechaza la necesidad que siente por esa hija, la dependencia por esa joven que quiere marcharse... Quizá esa madre sabe, conoce, los deseos de su hija y lucha contra ellos con su única arma: El victimismo... Hacerse la víctima de una forma ruin y cruel... Una víctima capaz de convertir en eso mismo a su propia hija, incapaz de asimilar lo que ve tras la ventana de la casa de la persona que para ella podría haber significado la libertad... Una libertad convertida en cenizas por el miedo... o el egoísmo...
La obra de Martín Mc Donagh no precisa de una escenografía grande y lujosa. Necesita mucho más: Dos actrices que nos sobrecojan, que nos presten el agrio sabor de la cárcel inhóspita de los afectos enfermizos... Lo consiguen. Maite Brik y Gloria López lo logran y de qué manera.
“La reina de belleza de Leenane” es una propuesta más que recomendable. Gloria López ha tenido la valentía de producir un texto arriesgado y con enjundia. Ha tenido la inteligencia de rodearse de importantes nombres de la escena, realizando a su vez, una labor interpretativa sobresaliente.
Sofía Basalo.